SEGUNDA OPORTUNIDAD
Que inesperado encuentro. La felicidad me fue esquiva durante muchos años. Siento que desperté de un letargo en el que fuí inducido con mi complicidad. Sacudir la polvareda y desperezarse fue el comienzo. Traté de entender los mensajes simples pero indescifrables para mi armadura. Ella Invadió mi corazón y mi alma y así vulneró todas mis barreras. A partir de allí solo pude conocer lo que es que te cuiden, te quieran y te necesiten. Yo estaba perdido y alguien tomó mi mano para llevarme a un mundo lleno de esperanzas. Pocos eran los latidos pero alguien me inyectó su dulzura y mi corazón palpitó de pasión. Nunca imaginé que la vida me mostraría su mejor cara y me regalaría una segunda oportunidad.